A las doce del mediodía, las campanas de las iglesias céntricas de la capital alavesa darán la salida a la cadena humana que recorrerá las calles peatonales de Vitoria. El recorrido seprolongará a lo largo de 1'5 kilómetros.

Los participantes portarán banderas blancas y un testigo para llegar finalmente, hacia la una de la tarde, a la Plaza de España, donde se dará lectura a un escrito y habrá una suelta de globos.

Las coordinadoras pacifistas hicieron un llamamiento a los habitantes de Vitoria para que coloquen banderas blancas en los balcones de sus casas.

Tanto las organizaciones pacifistas como representantes políticos y sociales hicieron un llamamiento a la sociedadparticipar en este acto a favor de la paz y la reconciliación.

A pesar de que otros años ya se han celebrado este tipo de acciones el último domingo del año en recuerdo a las víctimas del terrorismo, este año se pretende realizar por "la construcción de una convivencia en paz".

Pakea Orain, explicó que "se pretende abrir una nueva etapa. Cerrar la etapa de rechazo y enfrentamiento a la violencia exclusivamente para pasar a otra donde el elemento central sea la construcción de la convivencia sin lvidar el rechazo a la violencia".

Los convocantes, manifestaron que, "para alcanzar la paz, hay que renunciar al uso de la violencia para lograr fines políticos y sociales y decir con nitidez a ETA que abandone la lucha armada y el asesinato".

En este sentido, se refirieron al atentado de ayer en San Sebastián donde un Policía Nacional, Isidro Artigas, resultó herido de gravedad, al que le desearon un pronto restablecimiento pidiendo a los ciudadanos que "muestren su solidaridad con él".

Co respecto al comunicado emitido ayer por el nuevo movimiento por la paz y el diálogo, Elkarri, fundado por Jonan Fernández, entre otros, ex-miembro de Lurraldea, en el que "reprobaba" el atentado, manifesaron que "los miembros de Elkarri deben demostrar que condenan el uso de la violencia".