En un comunicado hecho público hoy, Unicef manifiesta su consternación por la continua pérdida de vidas humanas, en especial entre la población infantil, e invita a los adultos de la región a hacer tdo lo posible por proteger a los menores y alcanzar un final negociado a la violencia.

En los últimos días, 27 niños menores de 18 años han muerto en el conflicto y más de 1.200 han resultado heridos, muchos de ellos gravemente. Según Unicef, este tipo de violencia amenaza los más básicos derechos de los niños: el derecho a la supervivencia, a un desarrollo saludable y a un bienestar general.

Unicef muestra también su preocupación por un posible fracaso de las negociaciones, que podría conducir aun incremento del peligro para todos los niños de la región.