Es una de las conclusiones que recoge el último informe de la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN), que también ha puesto el foco en lo que puede ser el germen de una futura situación más grave para el derecho a la libertad de credo. El informe, con datos de 2023 y 2024, afirma que más de 5.400 millones de personas de todo el mundo, lo que supone casi dos tercios de la humanidad, viven en países sin libertad religiosa.

El término de 'persecución educada' lo acuñó el desaparecido papa Francisco, cuando se refirió a que en el mundo se están dando casos de persecución explícita y “otra forma más sutil, que a veces se manifiesta en formas de presión legal, cultural o institucional”, puede leerse en el resumen ejecutivo del informe, que detalla casos de “persecución educada” como “el pecado de la omisión” en las sociedades occidentales.

El director de ACN España, José María Gallardo, explicó a Servimedia que “la libertad religiosa está garantizada en España por el artículo 13.1 de la Constitución” y que “este derecho fundamental no está en peligro”. Sin embargo, “como el resto de países de OCDE, hay luces de alarma”.

Gallardo advierte algunos “problemas”, como la “escasa valoración del hecho religioso y de la libertad religiosa por los partidos políticos y la sociedad civil” y, a pesar de que España ha sido “nación de fervorosos católicos”, se ve “una secularización interna”, aunque aún quedan resquicios como el fervor popular en Semana Santa del que se hacen eco los informativos.

Además, detecta “diferencias” en el trato a los ciudadanos por cuestiones de libertad religiosa y de opinión. “Por ser católico un ciudadano no debería ser atacado”, revindicó, y llamó a los creyentes a “ser fieles” y estar “alineados” con lo que dice la portavocía de la Conferencia Episcopal, pues suele responder a la doctrina social de la Iglesia y el católico debería “defender” a sus obispos.

DISCURSO OBLIGADO

“Francisco dijo que parece que hay un discurso obligado en Occidente” y que quien se sale de él debe ser recriminado, recordó Gallardo a Servimedia, ante debates sociales como el aborto, la eutanasia, el modelo de familia, por lo que apeló a los católicos a “ser muy firmes en la defensa de los principios del cristianismo”, que se basa en la defensa de la vida.

“Es muy posible que la corrección política también juegue su papel en este tipo de persecución cuando no se le presta la atención debida a nivel de gobierno. La persecución educada se distingue de aquellas actividades criminales que apuntan directamente contra cristianos, como ataques contra fieles o iglesias. Sin embargo, el fracaso a la hora de combatir este comportamiento, a pesar de que se luche contra otras formas de odio, es un síntoma más de su existencia”, añade el informe de la fundación pontificia.

DATOS

Según la OSCE, la recopilación de datos es el primer paso en la lucha contra los delitos de odio; además, permite la creación de políticas concretas que los combatan y un apoyo adecuado a sus víctimas. “A pesar de que la OSCE ha identificado este problema, apenas se han dado pasos para resolverlo”, denunció ACN. Incluso se han dado “actos que demuestran animadversión contra los cristianos, crímenes incluidos” y “los datos sugieren que la situación está empeorando”.

Sin embargo, muchos de sus Estados participantes hacen “bastante poco” para cuantificar la gravedad de estos problemas dentro de sus fronteras. “La falta de un enfoque sistemático en la documentación de incidentes anticristianos conduce a medidas políticas ineficaces, a la normalización de la hostilidad, a un tratamiento desigual de los grupos religiosos y al aumento de la vulnerabilidad de las comunidades cristianas”, lamenta la fundación pontificia en su informe.

Según el documento, “los ataques a iglesias también fueron frecuentes en España. El 8 de marzo de 2023, como protesta por el Día de la Mujer, un grupo feminista pegó pósters en la entrada principal de la iglesia del Inmaculado Corazón de María, en Sabadell, que pintaron de morado. En España, también se han dado numerosos ataques contra sacerdotes y laicos. El 25 de enero de 2023, una persona sospechosa de yihadismo asesinó un sacristán e hirió a un sacerdote y a un marroquí converso en Algeciras. En Valencia, un hombre que entró en un monasterio al grito de ‘Soy Jesucristo’ asesinó a un sacerdote e hirió a varias personas”.