Así lo denunciaron los especialistas reunidos en el 74º Congreso Nacional de la Sociedad, que se celebra del 5 al 8 de octubre en Madrid.

“La prevalencia de la rinitis alérgica está en aumento. Afecta a uno de cada cuatro niños, un tercio de ellos no tienen diagnóstico. Lo consideramos una pandemia silenciosa”, explicó el vocal de la comisión de otorrinolaringología pediátrica, el doctor Christian Calvo.

Esta patología impacta negativamente en la calidad de vida de los niños y afecta a su olfato, a su correcta alimentación y a su rendimiento escolar. Según un estudio en el que participaron 1.834 estudiantes, los adolescentes con rinitis alérgica tuvieron un 86% más de probabilidad de suspender sus exámenes que sus compañeros sin RA.

Además, la rinitis alérgica también afecta a la calidad del descanso nocturno. “Los niños con RA tienen un riesgo mayor de padecer apnea obstructiva del sueño”, añadió Calvo. Asimismo, se relaciona con un mayor riesgo de maloclusión y mal desarrollo facial.