"Que el señor Arzalluz se vaya del PNV y no contribuya con su actitud constructiva en beneficio de los intereses generales a lo que esta sucediendo en el País Vasco siempre es una excelente noticia", dijo Rajoy con ironía al ser preguntado por el nuncio de Arzalluz durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.

"No se si hay alguien que pueda superarlo, pero, como lo veo difícil, entiendo que es una buena noticia un cambio en la Presidencia del PNV", insistió.

En todo caso, Rajoy se mostró convencido de que Arzalluz no es la única persona dentro de la cúpula del PNV que mantiene sus criterios. "El problema es mucho má amplio", admitió.

Como ejemplo, se refirió a la "responsabilidad institucional de primer orden" del leendakari, Juan José Ibarretxe, al que acusó de "despilfarrar" el dinero de los contribuyentes para financiar "campañas políticas" del PNV.

Rajoy rechazó además implícitamente la posibilidad de que el Ejecutivo participe en la mnaifestación convocada por Ibarretxe para el próximo día 22 contra ETA, por entender que el Gobierno vasco no tiene como prioridad la lucha contra el terrorismo.

De hecho, aseguró que el Gobierno central tiene la convicción "contraria", es decir, que el PNV "ni está en la Cnstitución, ni está en el Estatuto, ni está en participar en una acción clara contra el entramado de apoyo a ETA, que es la misma ETA".

Por tanto, juzgó "muy difícil" un entendimiento en esta materia con los nacionalistas vascos. "Ya me gustaría a mí", remachó.