PAIS VASCO. LA VIUDA DE FERNANDO BUSA ANIMA A "REBELARSE CONTRA EL MIEDO Y LA FALTA DE LIBERTAD"

MADRID
SERVIMEDIA

Natividad Rodríguez Lajo, viuda de Fernando Buesa y presidenta de la fundación que lleva el nombre de su marido, anima a los ciudadanos contrarios al terrorismo a que se rebelen contra el miedo, el sectarismo y la falta de libertad que sufre el País Vasco.

"La gente tiene miedo y es terrible. Hay mucho sectarismo y falta de libertad, y contra eso tenemos que rebelarnos y luchar. Hay que cubrir esos espaciosde silencio que algunos utilizan en beneficio propio", señala Rodríguez Lajo en una entrevista publicada en "El Correo", la primera que concede a un medio de comunicación desde el asesinato de su marido, el 22 de febrero de 2000, en Vitoria.

Explica que la Fundación Fernando Buesa defiende como ideales "la no violencia, el respeto a los demás y el empleo de la palabra" y que en ella tienen cabida personas de todos los partidos políticos, desde PNV-EA hasta el PP, salvo aquellos que defienden la violenia.

Otro de sus objetivos básicos es introducir en las escuelas "elementos de tolerancia, pluralidad y no violencia" porque considera que "en la educación está el gran hándicap" del País Vasco.

Asegura que parte de la juventud vasca está "perdida" y que "ha habido un fallo en la formación de la concienda de muchos chavales". "En el monolito en memoria de Fernando y de Jorge han pintado dianas, han dejado pistolas de juguete, la placa se ha cambiado varias veces, han estropeado el jardín... Algo etá fallando en la educación cuando los profesores están amenazados... Ver eso y no ponerle remedio es no hacer bien las cosas", agrega.

La viuda de Fernando Buesa lamenta la escasa protección con que contaba su marido y reconoce que en un principio pensó en abandonar el País Vasco tras conocer el asesinato, si bien añade: "He sentido siempre una rabia interior muy fuerte. No me van a echar de aquí; este es mi sitio, mi país; mis hijos están aquí, mis nietos quieren vivir aquí".

Rodríguez Lajo apotilla que una de las cosas que más le dolió tras la muerte de su marido fueron los desplantes del "lehendakari" Juan José Ibarretxe y de dirigentes del PNV en la capilla ardiente de Fernando Buesa. "Pero no les guardo rencor. Pienso sencillamente que están equivocados desde hace tiempo", asevera.

(SERVIMEDIA)
04 Nov 2001
MGR