Clima

Los países ricos “probablemente” cumplieron su promesa climática de aportar 100.000 millones de dólares a los pobres en 2022

- Con dos años de retraso, según la OCDE

MADRID
SERVIMEDIA

Las naciones desarrolladas “probablemente” cumplieran en 2022 el compromiso adquirido hace más de una década de movilizar anualmente al menos 100.000 millones de dólares en financiación climática para los países en desarrollo, aunque con dos años de retraso, según la OCCE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos).

La Cumbre del Clima de Copenhague (Dinamarca) acordó en 2008 que los países ricos deben aportar 100.000 millones de dólares al año a partir de 2020 para que las naciones vulnerables mitiguen el cambio climático y se adapten a sus impactos.

Ese objetivo se formalizó en la Cumbre del Clima de Cancún (México) en 2010 y se reiteró en la de París (Francia) en 2015, donde se indicó que ese compromiso se revisará al alza en 2025.

La serie histórica de la OCDE, recogida por Servimedia, indica que los países ricos movilizaron 52.400 billones de dólares en financiación para la acción climática en las naciones en desarrollo en 2013, cifra que ascendió a 61.800 millones en 2014.

Después se produjo un descenso hasta 44.600 millones en 2015, momento en que se ha producido una tendencia al alza: 58.500 millones en 2016, 71.700 millones en 2017, 80.000 millones en 2018, 80.400 millones en 2019, 83.300 millones en 2020 y 89.600 millones en 2021.

TENDENCIA “POSITIVA”

La sexta evaluación anual de la OCDE del progreso de los fondos climáticos de los países ricos refleja una tendencia positiva con un 8% más en 2021 respecto a 2020, por un 2,1% de incremento medio entre 2018 y 2020.

Antes de la Cumbre del Clima de Glasgow (Reino Unido) en 2021, la OCDE previó que el objetivo de los 100.000 millones de dólares probablemente se alcanzaría a partir de 2023, pero ese objetivo pudo haberse cumplido ya el año pasado.

“La tendencia general al alza es positiva y muestra que los países continúan intensificando las acciones para ampliar y movilizar el financiamiento climático. El aumento necesario para alcanzar el objetivo de 100.000 millones de dólares fijado para 2020 aún no se ha logrado, pero los datos preliminares disponibles en la OCDE indican que es probable que los países hayan alcanzado ese objetivo antes de 2023”, según Mathias Cormann, secretario general de la OCDE.

Cormann añadió: "Por supuesto, los países en desarrollo necesitan urgentemente estas importantes inversiones, por lo que los proveedores de financiación climática deben seguir intensificando sus esfuerzos de acuerdo con sus compromisos declarados".

La proporción de financiación climática para los países de ingresos medianos bajos y de ingresos medianos altos se mantuvo estable entre 2016 y 2021, mientras que la destinada a naciones de ingresos bajos subió de un 4% a un 10% en ese periodo.

Además, la relación de financiación climática destinada a los pequeños países insulares en desarrollo subió de un 2% en 2016 a un 4% en 2021, y la reservada a las naciones menos desarrolladas pasó de un 12% en 2016 a un 25% en 2020, para caer a un 20% en 2021.

Estas tendencias pueden indicar un reconocimiento cada vez mayor de los proveedores internacionales de financiación climática ante las crecientes necesidades y oportunidades para la acción climática en las regiones más pobres y vulnerables.

FONDOS PÚBLICOS Y PRIVADOS

Por otro lado, los fondos públicos para el clima (bilaterales y multilaterales) casi se duplicaron entre 2013 y 2021, al pasar de 38.000 millones a 73.100 millones de dólares, lo que representa la gran mayoría del total de 89.600 millones de dólares en 2021.

Dentro de esa cantidad, las aportaciones multilaterales más que se duplicaron desde 2013 y superaron a las bilaterales a partir de 2019.

En cuanto a la financiación climática privada movilizada, para la que solo hay datos comparables disponibles desde 2016, ascendió a 14.400 millones de dólares en 2021, con lo que volvió al nivel de 2019 tras una caída en 2020. Sin embargo, la tendencia general es al estancamiento desde 2017.

ASPECTOS A MEJORAR

Según la OCDE, dos componentes de la financiación climática siguen siendo “obstinadamente bajos”: la privada (14.400 millones de dólares en 2021, un 16% del total) y los fondos para adaptación (bajaron un 14% en 2021 hasta suponer un 27% del total movilizado).

“Existe una necesidad apremiante de que los proveedores internacionales incrementen significativamente sus esfuerzos en dos áreas clave: la financiación de la adaptación y la movilización de la financiación privada”, indicó Cormann.

El secretario general de la OCDE agregó: “La financiación para la adaptación es esencial para crear resiliencia y la financiación privada procedente de una serie de actores comerciales en los países desarrollados y en desarrollo es fundamental para cerrar la brecha de financiación de las inversiones en acción climática, en particular en sistemas de energía limpia, agricultura, silvicultura, uso de la tierra, adaptación, y resiliencia”.

(SERVIMEDIA)
17 Nov 2023
MGR/gja