Pallete presentará esta nueva hoja de ruta con motivo del ‘Día del Inversor’ (Capital Markets Day), una cita con analistas que no celebraba la teleco desde el 2011 y que tendrá lugar en esta ocasión en la misma jornada en la que el grupo publicará sus resultados de los nueve primeros meses del año.

Esta reunión especial con expertos financieros se producirá acto seguido de la conferencia ordinaria trimestral convocada con los analistas por el anuncio de resultados.

Será éste un ‘Día del Inversor’ con un formato híbrido, por videconferencia y con presencia física de varias decenas de analistas en la sede central del grupo.

Telefónica llega a este cónclave con el mercado con numerosos interrogantes sobre su futuro, con el del accionariado como el de mayor calado, en un doble frente: por un lado, con el fondo saudí STC, a la espera de recibir el visto bueno del Gobierno a su decisión de compra de un 9,9% del capital, y por otro, con el anuncio del propio Ejecutivo de que está “explorando” volver a tener presencia a través de la SEPI en la teleco, a la que la vicepresidenta Nadia Calviño ha definido como una compañía “estratégica”, “si no la más estratégica” de España.

Pallete presentará además el plan estratégico en medio del anuncio que ha hecho Telefónica de un nuevo ajuste de plantilla, en forma de un nuevo plan de salidas voluntarias (PSI) que podría afectar hasta a 5.000 empleados y del que se conocerán más detalles en fechas próximas.

Telefónica desvelará este miércoles el rediseño de sus principios marco de actuación para los próximos tres ejercicios cuando sus tres directos competidores en España están también en una vorágine de incógnitas. De una parte, Orange y MásMóvil están en capilla a la espera de saber las condiciones que le va a poner Bruselas para su fusión, y de otra, Vodafone, empezando una nueva etapa tras la reciente adquisición de la filial española por el fondo Zegona.

Telefónica seguirá teniendo como desafíos en los próximos tres años reflotar la cotización de su acción, que esta semana se situaba por debajo de los 4 euros; recortar la deuda (27.500 millones de euros a cierre de junio), y redefinir su presencia en Latinoamérica.