Agramunt negó que hubiera sido presionado por la dirección nacional del partido y aseguró que tomó la decisión después de reflexionar durante las vacaciones y tras haber mantenido conversaciones con el presidente del PP, José María Aznar.

Asimismo, señaló que desde Génova, 13 le han encargado "otras responsabilidades políticas" a nivel nacional, que seránconcretadas en las próximas semanas.

El todavía presidente del PP en la Comunidad Valenciana dijo que para su sustitución la dirección del PP ha pensado en Eduardo Zaplana, el actual presidente popular en la provincia de Alicante y alcalde de Benidorm. Agramunt subrayó que Zaplana tendrá todo su apoyo cuando acceda al cargo.

Tras hacer hincapié en que se siente muy satisfecho de la labor realizada al frente del PP de Valencia durante los cuatro años que ha sido presidente, Agramunt indicó que no a a consentir que se "rompa" la unidad del partido.

Ante las insistentes peticiones de los periodistas para que matizase estas últimas afirmaciones, Agramunt dejó claro que no iba a añadir nada más y pidió a los informadores que respetaran su silencio.