Folgado subrayó que el PIB está aumentando "clarament" por encima del 4%, por lo que aseguró que el objetivo de crecimiento para este año (fijado también en 4%) es perfectamente factible. No obstante, reconoció que en el segundo semestre del año se producirá una "suave" desaceleración de la economía.

En su opinión, la composición del crecimiento está siendo más sólida y equilibrada que en trimestres pasados, puesto que la demanda interna va perdiendo protagonismo, a la vez que se va reduciendo la aportación negativa del sector exterior.

Asimismo, dstacó que se ha producido un "fuerte" incremento del empleo a la vez que ha aumentado la productividad, por lo que señaló que "caminamos hacia la convergencia real con los países más desarrollados de la Unión Europea".

A la vista de este panorama, el secretario de Estado aseveró que España cuenta con un "importantísimo margen" para hacer frente a la crisis provocada por la subida del petróleo y la debilidad del euro, de forma que la marcha de la economía no se resentirá, como ya ocurrió en la crisis fnanciera de 1998-99.

Respecto a estas circunstancias y al rebrote inflacionista, Folgado reconoció que existen ciertos "riesgos". Llamó la atención de los empresarios y de los sectores para que "tengan más en cuenta su competitividad a medio y largo plazo que una mejora de sus rentas a corto".