Ifema, entidad organizadora de Fitur, se adhirió a este Código -promovido por la Organización Mundial del Turismo (OMT)- en 2016.

La Fundación Franz Weber consideró que la promoción de actos taurinos vulneraría este documento, ya que existen recomendaciones en sentido contrario de otros órganos, como el Comité de los Derechos del Niño de la ONU, que chocan con esta difusión en relación a la participación de personas menores de edad.

“Para prevenir los efectos nocivos para los niños del espectáculo de los toros, el Comité recomienda que el Estado parte prohíba la participación de niños menores de 18 años como toreros y como público en espectáculos de tauromaquia”, indica el Comité de los Derechos del Niño en sus observaciones finales a España en 2018.

En agosto de 2023, este Comité realizó una recomendación a todos los Estados parte en su Comentario General nº 26 sobre Derecho a un Medio Ambiente Sano. “Los niños deben ser protegidos de todas las formas de violencia física y psicológica y de la exposición a la violencia, como la violencia doméstica o la infligida a los animales”, indicó.

La FFW indicó que promocionar la tauromaquia en Fitur vulnera el artículo 2 del Código Ético, cuando las actividades turísticas no se encaminan a “promover los derechos humanos y, en particular, los derechos específicos de los grupos de población más vulnerables, especialmente los niños”, ya que, según esta fundación naturalista,” en los espectáculos taurinos se permite e incluso impulsa la participación de menores, desde los tendidos o en formato de participación directa”.

La presencia en expositores en Fitur que animan a potenciales visitantes, a empresas sectoriales y a touroperadores a visitar eventos como los ‘bous al carrer’, que provocaron 1.018 personas heridas en 2023 en Comunidad Valenciana o Coria (Cáceres) son algunos de los ejemplos de que el Código Ético no se cumpliría, según FFW.

Según la Fundación Franz Weber, Fitur llegó a presentar públicamente en ediciones anteriores la convocatoria de ferias taurinas que incluían promociones o descuentos para niños, lo supone “una clara vulneración” de del Código Ético Mundial para el Turismo y de las recomendaciones del Comité de los Derechos del Niño. “Este año puede suceder lo mismo”, subrayó.