"Son dossituaciones similares, por no decir iguales", declaró a Radio Nacional el letrado, quien señaló que, si bien es cierto que durante la dictadura militar chilena hubo 3.000 muertes de desaparecidos, durante el mandato de Felipe González también hubo fallecimientos provocados por los GAL.

Asimismo, frente al argumento de que no se pudo procesar a González por falta de pruebas, López-Montero se preguntó: "¿Y aquí hay pruebas de que el señor Pinochet haya torturado materialmente?".

Tras recordar que e juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, encargado de la instrucción del "caso Pinochet", fue responsable en su día de la reapertura del "caso GAL", López-Montero señaló que la diferencia entre ambas causas radica en que en la primera ha acusado directamente a Pinochet, en lugar de poner una incógnita, como en la segunda.

Para López-Montero, el juez Garzón decidió procesar a José Barrionuevo y a Rafael Vera porque no se atrevió a poner al presidente del Gobierno en la "x" que coronaba la pirámie de los GAL.

Tras advertir de que en materia judicial "no hay que entrar en casa ajena e intentar hacer justicia", López-Montero aseguró que el "'caso Pinochet' compete a la justicia chilena, completamente" y que el juez Garzón "se ha extralimitado".

El abogado explicó que todo el proceso abierto con la confirmación de la extradición de Pinochet por parte del Reino Unido puede dilatarse en función de los recursos que se pueden ir interponiendo en el país vecino, una demora que también puede prodcirse aquí utilizando los mismos instrumentos, indicó.