En declaraiones a Servimedia, Marset apuntó que es muy posible que se haya producido "una presión importante incluso por parte del Partido Socialista de Chile", quien considera que el "caso Pinochet" le ha perjudicado electoralmente.

"Es un flaco servicio el que hace a la justicia el Gobierno (británico) y Robin Cook en esa cuestión, porque ahí no hay consideración humanitaria que valga. Un hombre que ha cometido delitos, se supone que gravísimos, tiene que ser juzgado. Otra cosa es que en el juicio se tomen la medidas necesarias para que no se perjudique su salud", indicó.

A su juicio, no existe ningún atenuante para que Pinochet no comparezca ante un juez y dé cuenta de las acusaciones que hay sobre él. "Se ve que son los efectos colaterales de la tercera vía en el año 2000. Es una burla que se hace a la justicia internacional. Es un mal comienzo para el año 2000, muy mal comienzo", subrayó.