Así lo anunció este lunes en rueda de prensa el portavoz de la Ejecutiva del partido, Pablo Fernández. "Vamos a denunciar ante la Fiscalía a los cargos públicos de Vox que han alentado estos días la violencia compartiendo bulos y difundiendo vídeos incluso de linchamientos", prometió, llegando a señalar personalmente al presidente de Vox, Santiago Abascal, como "culpable de ver cómo hay pogromos racistas". También al presidente de Vox en la región, José Ángel Alteiro.

Además, Fernández quiso " condenar" al presidente de la región de Murcia, Fernando López Miras, que desde su punto de vista "ha blanqueado absolutamente estos hechos de violencia ultra", que desde el principio calificó de "terrorismo racista". Frente a él, Podemos estima que la única posible respuesta es la regularización de todos los inmigrantes que viven en España, algo que el PSOE a su juicio "sigue bloqueando".

Para este partido, estas agresiones se dan porque "existe una discriminación y un racismo institucional y estructural" que ampara a sus autores, como a su juicio demostraría que haya habido palizas "delante de la policía sin que hubiera nadie detenido al instante".

Más tarde contrastó que haya sindicalistas en prisión, como 'Los Seis de Zaragoza' o 'Las Seis de la Suiza", o que en Cádiz hubiera 20 detenidos en la huelga del metal de Cádiz, o que en la de Cartagena se desplazaran 200 policías nacionales, con que, a su juicio, "en Torre Pacheco apenas había policías" y algunos de ellos estaban "compadreando con los españoles".

Fernández no perdió la ocasión de recordar que el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, estaba este domingo en la final del torneo de tenis de Wimbledon, que disputaba el tenista, también murciano, Carlos Alcaraz, y aseguró que Podemos no espera nada de él, porque "perfectamente podría estar en el Partido Popular o en Vox".