Según informó este martes la Guardia Civil, el polizón fue descubierto ayer cuando los agentes recibieron un aviso del Centro de Coordinación de Operaciones del aeropuerto de Bilbao.

Los responsables alertaron de que durante el desembarque del equipaje de un vuelo procedente de El Cairo, un hombre salió del interior de la bodega trasera y comenzó a correr por la cinta de desalojo para llegar hasta la terminal.

Los vigilantes de una empresa de seguridad le persiguieron a través del patio de carrillos, que es el mecanismo de cintas donde los trabajadores del aeropuerto organizan las maletas que llegan desde distintos vuelos y fue interceptado en el bloque técnico del aeropuerto.

Los servicios sanitarios tuvieron que atender al huido, aunque no fue necesario trasladarlo a un centro médico. Posteriormente, se le entregó a la Policía, que es el organismo comeptente en estos casos y el polizón se negó a firmar su retorno voluntario, por lo que fue trasladado a la sala de no admitidos para ser identificado formalmente.

REGISTRO

La Guardia Civil registró e la aeronave sin hallar nada destacable. El Grupo de Especialistas en Desactivación de Artefactos Explosivos y de naturaleza NRBQ con sede en la Comandancia de Bizkaia, también realizó un reconocimiento exhaustivo al avión, permitiendo que el mismo continuase su operativa y embarcase pasajeros para el vuelo de salida con destino a Egipto.