Así lo aseguró la vicesecretaria de Organización del PP, Carmen Fúnez, en la rueda de prensa posterior al último Comité de Dirección del año, donde dijo que esta moción de censura es la de la “indignidad” e insistió que es el primer “pago” del “pacto encapuchado” de Pedro Sánchez con EH Bildu para “comprar” su investidura como presidente del Gobierno.

Fúnez, que representará mañana al PP nacional en el Pleno municipal, advirtió al PSOE de este es un pacto de “la vergüenza” para “muchos” de sus militantes y apuntó a la renuncia de dos miembros del PSN a entrar en el Ayuntamiento de Pamplona como prueba de ello.

Mostró su esperanza por que esta actitud “se contagie al resto de miembros” del PSN para que “fracase” la moción de censura que aupará a Joseba Asiron como nuevo alcalde de la ciudad, y subrayó que “aún” hay “tiempo” para que Sánchez llame al líder de UPN, Javier Esparza, y “paralice la moción de censura”.

De lo contrario, advirtió de que los socialistas permitirán que un partido que “perdió las elecciones y que no ha condenado al terrorismo” se haga con la Alcaldía de Pamplona, uno de los municipios “más castigados de España” por ETA, y se produciría “un antes y un después en la política española” con una moción de censura “contra los pamploneses y la dignidad”.

“En las últimas elecciones pusimos nuestros votos al servicio del Partido Socialista, de la democracia y la Constitución para impedir que Bildu alcanzase la alcaldía de Vitoria o la Diputación de Guipúzcoa […]. Lo repetiríamos porque nuestra hoja de ruta, nuestra convicción está en la Constitución”, declaró Fúnez.

“Pero mañana se abre un nuevo tiempo político en el que el único partido constitucionalista de ámbito nacional es el Partido Popular, en la medida que el Partido Socialista abdica de serlo, permitiendo que Bildu alcance la Alcaldía de Pamplona”, concluyó.