En su propuesta, el PP reclama también al Ejecutivo la puesta en marcha de un conjunto de medidas de carácter informativo y formativo para la transición al euro, "que incentive y acelere la adaptación de la oferta turística española a la previsible nueva situación monetaria, de forma que se puedan aprovechar enteramente todas las ventajas y las nuevas oportunidades de negocio derivadas de ello".

Para justificar su iniciativa, los populares recurdan que España está apostando "decididamente" por la Unión Monetaria Europea y, consecuentemente, por la introducción del euro como unidad de cuenta, medio de pago y unidad de valor en todas las transaciones comerciales de la economía española de los próximos años.

"Pero nadie puede negar", asegura el texto de la proposición, "que costará tiempo y esfuerzos adaptarse a la medición del valor de las cosas no en pesetas, sino en euros. Es decir, que precisiblemente los efectos en los primeros momentos n sólo serán de carácter económico sino muy probablemente psicológico y no exageraríamos al decir que la peseta forma parte desde hace 125 años del alma colectiva de los españoles".

Según el PP, la mejor forma de conseguir hacerle un hueco al euro es reducir, en la medida de lo posible, las incertidumbres relacionadas con esta "mutación monetaria".