Apertura de la legislatura

PP y Vox critican el discurso “partidista” de Armengol y niegan el aplauso

MADRID
SERVIMEDIA

Las parlamentarios de PP y Vox guardaron silencio este miércoles después de la intervención de la presidenta del Congreso, Francina Armengol, en la sesión de apertra de la legislatura en el Congreso de los Diputados mientras en las filas socialistas y de Sumar aplaudían sus palabras. Tras el acto confesaron que les había parecido “muy partidista” y poco institucional el discurso.

Durante el acto solemne de apertura solemne de la XV Legislatura, en presencia de los Reyes y la princesa de Asturias -que, al igual que Felipe VI lucía las medallas del Congreso y del Senado-, Armengol realizó un discurso en el que abogó por el diálogo y el parlamentarismo, además de reivindicar la legitimidad del Ejecutivo que preside Pedro Sánchez por contar con el respaldo de una mayoría parlamentaria.

No obstante, sus palabras recordando algunas “medidas históricas” como la ley general de sanidad, la de igualdad efectiva de hombres y mujeres, la de pensiones no contributivas, la de la dependencia, el Ingreso Mínimo Vital o la ley de cambio climático y transición energética, entre otras, generaron revuelo y murmullo en el Hemiciclo, hasta el punto que algún parlamentario gritó “esto no es un mitin”.

Ese fue quizás el momento culmen de la incomodidad que, casi desde el principio, se veía entre los escaños de Vox con las palabras de Armengol, hasta el punto de que parecía que alguno iba a levantarse y abandonar el Hemiciclo.

No obstante, cuando fue el momento de las palabras del Rey, el silencio se apoderó de la Cámara Baja abarrotada de diputados y senadores, con las excepciones de los parlamentarios nacionalistas e independentistas. Salvo el PNV que, a diferencia de la reciente Jura de la Constitución por parte de la Princesa de Asturias, esta vez sí estuvo representado por sus portavoces en el Congreso y Senado.

Al terminar las palabras del Rey, toda la Cámara se puso en pie aplaudiendo, incluidas las personas que estaban en las tribunas de invitados, entre los que se encontraba el asturiano Adrián Barbón, como único presidente autonómico presente, y otras autoridades como el presidente del Tribunal Constitucional, Cándido Conde-Pumpido; el fiscal general, Álvaro García Ortiz; la presidenta del Consejo de Estado, Magdalena Valerio; el nuncio apostólico en España, Bernardito Auza; además de la directora del CNI, Esperanza Casteleiro, y las máximas autoridades militares.

Por primera vez se vio de nuevo por esta Cámara a la expresidenta Meritxell Batet desde que dejó el escaño, junto a otros presidentes de Congreso y Senado como Federico Trillo, Esperanza Aguirre, Juan José Laborda y Juan José Lucas, entre otras autoridades.

Felipe VI aguardó un minuto en pie mientras era aclamado por los presentes con aplausos, con alguna excepción como la de los dos parlamentarios del PNV y el secretario primero de la Mesa del Congreso, Gerardo Pisarello, que no aplaudían. Poco después, y tras un tímido ‘viva el Rey’ que se escuchó desde los escaños, don Felipe hizo un gesto a Armengol y a la Reina para que abandonaran la tribuna principal por la puerta que solo se abre para las grandes ocasiones.

Nada más salir del Hemiciclo la Familia Real pararon los aplausos y los presentes comenzaron a sarlir, siendo los primeros los miembros del Ejecutivo para dirigirse, acto seguido, al besamanos a los Reyes y la Princesa en el Salón de Pasos Perdidos, donde se vieron algunos saludos con un simple apretón de manos acompañados en algunos casos con un ligero gesto con la cabeza, y otros con una acusada genuflexión.

Una vez acabó todo el acto protocolario, con la parada militar y la marcha de la Familia Real, las conversaciones informales entre parlamentarios y periodistas versaban, principalmente, sobre las palabras de Armengol así como por la cita de PSOE con Junts en cumplimiento del acuerdo de investidura.

(SERVIMEDIA)
29 Nov 2023
MML/gja