En un acto con 84 alcaldes del PP en la sede nacional del principal partido de la oposición, puso de ejemplo de esta realidad a Jerez, de donde es alcaldesa. Dijo que desde La Moncloa le han trasladado que, para “arreglar” la deuda pública de su ayuntamiento, debe ir “de la mano con un alcalde catalán” y que su municipio recibe cero euros cuando plantea inversiones estratégicas.

Por ejemplo, señaló que, cuando Jerez pidió financiación al Estado para convertirse en capital de la cultura en Europa, recibió “cero euros”, pero que cuando lo hizo Barcelona, se le dieron 50 millones en Presupuestos Generales del Estado (PGE). O que cuando pregunta cuántos fondos percibirá Jerez por su gran premio de MotoGP, la respuesta es “nada” porque Montmeló es el que los recibe. Y todo ello, dijo, cuando sus vecinos pagan “más impuestos que nunca”.

“Esa discriminación, esa ausencia de lo ayuntamientos a la hora de construir el país se visibiliza en toda España en gestos que el Gobierno no tiene, no con los alcaldes del PP o del PSOE, sino con cada uno de nuestros ciudadanos”, declaró. “Pedro Sánchez ha elegido entre ser municipalista o independentista, ser independentista”.

García-Pelayo lamentó que el Gobierno trate de “cuidar y mimar solo a una parte de España”, mientras el resto se busca “la vida”. Denunció que los españoles perciben este “claro trato discriminatorio” e “injusto”, y deploró también que el Ministerio de Hacienda hable de la reforma de financiación autonómica y no de la local. “Hay un Gobierno de España mudo”.

En este sentido, recriminó el “desprecio” de la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, y el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, que “no reciben” a la FEMP, que es “clave” en el “desarrollo de España”.

En este contexto, dijo que el mayor elemento de “certidumbre jurídica” es la Constitución y defendió que la FEMP tiene “que salir de la postración” en la que estuvo “durante años” en la etapa del PSOE, cuando estuvo “callada y silenciosa frente a la discriminación de los ayuntamientos”. Así, aseveró que no se someterán a la “sumisión” del Gobierno.