En el marco de los Cursos de Verano de la Universidad Complutense de Madrid, señaló que “no está claro a qué profesionales han acudido las víctimas del terrorismo ni la utilidad clínica de las intervenciones llevadas a cabo en los centros de salud mental del Sistema Nacional de Salud” para tratar el trastorno por estrés postraumático.

En cuanto a los factores asociados a los síntomas de estrés postraumático después de los atentados terroristas cometidos por ETA, Jesús Sanz destacó la falta de apoyo social después del atentado, que ocurra en el País Vasco, las lesiones físicas y el malestar provocado por los procesos legales.

Asimismo, señaló que la victimización puede ocurrir de tres formas: la primaria, provocada por los daños del ataque terrorista; la revictimización, como consecuencia de sufrir varios delitos; y la victimización secundaria, a través de la repetición de las declaraciones y las exploraciones, la dilación de los procesos judiciales, la falta de información o las pruebas parciales.

Por ello, Jesús Sanz afirmó que “el apoyo social después del atentado es un factor protector muy importante de la salud mental que se debe fomentar y facilitar tanto a nivel micro como macrosocial” a través de formaciones activas con profesionales, sensibilización y educación de la sociedad.