Así lo anunció a la prensa antes de su primera comparecencia como ministro ante la Comisión de Ciencia, Innovación y Universidades del Congreso, para repasar las principales líneas de actuación de sus políticas en "continuidad" con las que marcó su predecesor, Manuel Castells.

El anuncio del ministro apunta a que la formación pedagógica del profesor universitario sea obligatoria y se realice en el primer año de la plaza de ayudante doctor, que es la figura de entrada en la carrera académica, según la Ley de Universidades, la LOSU.

Según el Gobierno, el contenido y duración de esta formación se establecerá con las universidades y, en particular, con sus unidades de formación e innovación docente, que serán las encargadas de impartirla.

Subirats reiteró que esa formación responde a su deseo de "reforzar el tema docente", porque cree que las universidades no pueden ser ni "solo academias" ni "solo laboratorios". Así, ese curso para poder enseñar en un campus se tratará de consensuar en "equilibrio" entre autonomías y universidades.

El ministro explicó que la propuesta nace de su experiencia de más de 40 años en la universidad y a partir del "éxito" de las unidades de innovación docente de las universidades.

Asimismo, apuntó que quiere llevar al Parlamento el proyecto de la citada LOSU para que entre a trámite en este periodo de sesiones para ser aprobada en los primeros meses de 2023.

El ministro catalán también se pronunció sobre la crisis del PP, de la que interpretó que se debe a "problemas de liderazgo". Además, lamentó que lo que está pasando a los 'populares' "no es bueno para el sistema político", pues la oposición también tiene que contribuir a la estabilidad política, dijo, en línea con lo que han manifestado otros miembros del Gobierno.