"l pasillo del gasto público para infraestructuras va a ser muy estrecho en los próximos años, por lo que los proyectos entrarán en cola, uno detrás de otro", señaló.

Zaragoza, que participó en un curso de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), aseguró que los recursos públicos son insuficientes para financiar el volumen de infraestructuras que España necesita.

Por ello, añadió, es necesario buscar mecanismos de financiación complementarios, entre los que citó el capital privado y elcapital público no estatal, procedente de las comunidades autónomas, cajas de ahorro, cámaras de comercio y montepíos, entre otras instituciones.

En todo caso, subrayó, "seremos los españoles los que paguemos las infraestructuras, ya sea por la vía de los impuestos, la de los precios o con tasas".

Para el responsable del MOPT, lo ideal sería "combinar un sistema aceptado socialmente que permita recaudar el dinero necesario y ordenar la demanda de transportes".

Explicó que actualmente, los ténicos del ministerio están elaborando un informe sobre mecanismos de financiación de infraestructuras alternativas al público, que el año que viene pasarán a la valoración del ministro.

PELIGRA EL EMPLEO

Por otra parte, la patronal del sector de la Construcción Seopan hizo público hoy un comunicado en el que expresa su "profunda preocupación" por el recorte presupuestario anunciado por el Gobierno para este mismo año en infraestructuras, educación y defensa.

Seopan indica que "como viene siendohabitual, el recorte se produce una vez más en las inversiones y no en el gasto corriente de las Administraciones Públicas".

A su juicio, esta reducción "supondrá nuevos retrasos de muy difícil recuperación en la realización de las infraestructuras del país ante el reto del desarrollo y la competitividad que demanda nuestra integración total en la CE".

La organización patronal advierte que la medida repercutirá "gravemente" en el empleo, ya que la construcción es el sector que genera más puestos e trabajo en España.

Además, concluye la nota, "aumenta la incertidumbre ya existente en las empresas del sector, cuyas perspectivas, tanto en los aspectos de cartera de pedidos, como de ejecución de obra y cobros pendientes, empeoran considerablemente a corto plazo".