Según ha comunicado la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Converse se plantea como objetivo que las actividades locales contribuyan al comercio internacional.

Mario Tueros, miembro de la Oficina Regional de la OIT para las Américas en Lima, comentó, en referencia a la iniciativa de Converse, que "es la clave para el desarrollo social y humano de las mujeres y sus familias".

Tan sólo en la región de Ayacucho, que lucha contra la pobreza extrema y el alto nivel de desempleo en una economía rural, más de 1.000 mujeres se han beneficiado de esta oportunidad que brinda la firma de calzado.

Según confirmó la empresa, aunque el modelo de los zapatos no varía, las bordadoras incorporarán dibujos inspirados en su cultura ancestral para agregar valor económico y cultural al producto.

Este programa de integración laboral forma parte de un proyecto financiado por la agencia de desarrollo belga. Para la OIT, es un ejemplo que muestra el lado positivo de la globalización.