Fuentes de Ferraz y del PSdeG coinciden en ver a los populares “nerviosos” porque están rozando la cifra de los 38 escaños, que es la que otorga la mayoría absoluta, y se aferran a que “hay opciones” debido al “margen de error” de las encuestas.

Consideran en las filas socialistas que el PP “ya no pelea por escaños” sino que “solo defiende lo que tiene bajo mucha presión” y de ahí la “hipermovilización” en las filas populares, máxima tras los “líos” de Alberto Núñez Feijóo.

Un giro que, destacan, ha permitido hablar sin problemas de la amnistía y de los pactos con los independentistas que, admiten, podía hacer “algún daño” al PSOE, pero ahora permite atacar al Partido Popular tanto en Galicia como a nivel nacional.

En este horizonte, cuando faltan tres días para la cita con las urnas, en el PSdeG creen que hay opciones de quitar al PP un escaño en A Coruña, Lugo y Pontevedra y de ahí precisamente que el cierre sea, por un lado, en Santiago de Compostela mañana viernes con Pedro Sánchez y, por otro, en Vigo con José Luis Rodríguez Zapatero.

No obstante, la resignación también cala en el PSOE consciente de que el cambio lo lideraría el BNG y de ahí que en la campaña no haya confrontado con su candidata, Ana Pontón. El principal temor en Ferraz radica en que no se logre la movilización necesaria, algo que ven posible porque “ya ocurrió” el 23-J, y que su pérdida de escaños pueda ser equivalente a lo que necesitaría la suma con el BNG para lograr un cambio en la Xunta.

En el horizonte del PSOE, ni Podemos ni Sumar ni Vox logran representación alguna aunque sí ve cada vez más consolidado que haya representación de la formación Democracia Ourensa que lidera el alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome.