Después de conocer que el PIB cayó un 0,7% en el último trimestre de 2008, la dirigente socialista sentenció en los pasillos del Congreso que "efectivamente, España ha entrado en recesión".

Achacó el dato sobre todo a la crisis inmobiliaria de la economía española, "fruto de la política ultraneoliberal que llevó anteriormente el PP", y subrayó que a pesar de ello la contracción del crecimiento "es menor" que la de otras economías.

"No es casual", añadió, sino consecuencia de que el Gobierno español fue el primero en adoptar medidas para mitigar los efectos de la crisis. Ante una coyuntura complicada, reiteró, hay "dos actitudes".

Una, explicó, la del PSOE, diagnosticar y presentar medidas "en la dirección adecuada". Otra, la del PP, "que parece que se regodee en la crisis porque lo único que hace es alarmarse de los datos".

Rodríguez-Piñero lanzó por ello un mensaje de tranquilidad a los ciudadanos y criticó el "alarde de aspavientos absolutamente irresponsable" que exhibió el portavoz del PP, Cristóbal Montoro, durante la comparecencia en el Congreso del titular de Economía, Pedro Solbes.