Así lo afirmó Maroto en declaraciones tras su visita a los trabajos de ocultamiento de la calzada en la zona del Hospital de la Paz, uno de los puntos críticos de movilidad junto al cubrimiento de la M-30 en ventas o el intercambiador en Conde Casal, donde declaró que esas labores en la Castellana afectan a más de 31 líneas interurbanas, al hospital y tiene un “único” paso peatonal.

La edil acusó que estas obras se están realizando con mucha “improvisación y falta de gestión” y que lo único que “receta” Almeida es “paciencia” y “generosidad”, cuando, según aseguró la portavoz socialista, lo que necesita la capital es “una mayor planificación”.

“Su improvisación está afectando a miles de madrileños y que las recetas como la paciencia o la generosidad no van a dar solución al día a día de los vecinos. Lo que le pedimos es que se centre en gestionar esta ciudad y que deje las dudas sobre su continuidad en el Ayuntamiento para otro momento”, enfatizó Maroto.

Una vecina de la colonia de San Cristóbal, zona aledaña a las obras de cubrimiento del paseo de la Castellana, denunció que están viviendo “un calvario” con las labores por tener “ruidos constantes” porque, según asegura, están trabajando “las 24 horas” del día.