"Lo que pedimos es que quien puede y debe velar por el cumplimiento de la legalidad y por la tutela de los derecho cumpla con la función que le corresponde constitucionalmente" sin necesidad de "estimulación" por parte de los partidos, señaló.

Juan Alberto Belloch explicó así a Servimedia sus críticas al fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, y al fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Eduardo Fungairiño, al tiempo que descartó la personación socialista en la causa, tal y como ha hecho Izquierda Unida.

Cuando una fuerza política se persona en un sumario abierto, agregó, los "intereses partidistas se incororan necesariamente" a esa causa, y la resolución o sentencia que dicte posteriormente el juez, está "condicionada" por esa intervención.

"Si tuviéramos un fiscal general del Estado, en vez de un fiscal general del Gobierno, no sería necesaria ninguna otra intervención para que cumpliera su función de perseguir los delitos", aseveró.