Con estas reflexiones, Redondo Terreros salió al paso de quienes quisieron ver en la intervención de González ante el Comité Federal del PSOE de ayer una recriminación expresa Rosa Díez por encabezar su manifiesto con el recuerdo de que ella no estuvo en el Congreso de Suresnes, en el que Felipe González resultó elegido secretario genera y Alfonso Guerra vicesecretario.

Al final de su intervención, González recordó con orgullo que el "sí estuvo en Suresnes", lo que fue entendido como una reivindicación del papel que aún pueden jugar los veteranos líderes socialistas en la vida del partido.

Redondo se preguntó si "existe eso que llaman felipismo" y reconoció que "es posible decir que ha terminado un periodo que se inició en 1974 con el Congreso de Suresnes", lo que no significa que quienes participaron en él no puedan intervenir n la vida política del PSOE y de España.

A su juicio, muchos de esos líderes "han escrito las páginas más brillantes del PSOE y con seguridad también de España" y son personas que tienen "crédito político para intervenir en la vida política del PSOE y de España hoy".

Por tanto, dijo, "no es incompatible haber estado en Suresnes con mirar hacia el futuro". Redonde concluye, por tanto, que cualquier dirección y cualquier secretario general que salga del próximo Congreso "haría bien en recabar el apyo de personas que tienen tanto crédito político como Felipe González, Alfonso Guerra, Enrique Múgica o el propio Nicolás Redondo (padre)".

"Yo lo haría", continuó, "y no tengo problema en decir que para mí sería más fácil tener el apoyo de estos compañeros para mirar hacia el futuro que no tenerlos apoyándome. Su apoyo haría el trabajo más fácil con seguridad".

Nicolás Redondo se mostró convencido de que todos los veteranos líderes del PSOE "pueden apoyar a Rosa Díez". Restó importancia a la punualización de González en el Comité Federal porque "conciéndole, y conociendo su sentido del humor muchas veces seco y contundente ese comentario no tiene que influir negativamente en nadie".

Finalmente, Redondo pidió "mucho autocontrol" en el partido y en especial en sus dirigentes que, a su juicio, deben estar "a la altura de las circunstancias y mostrar una cierta compostura".