La capitalidad de Valencia, adelantada en enero por la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, responde al avance de este modelo económico en la región mediterránea.

“Valencia está desarrollando en diversos ámbitos este modelo económico que es un aliado para afrontar con justicia social las necesarias transiciones ecológica y digital”, señaló la secretaria de Estado de Economía Social, Amparo Merino.

Precisamente, el Consejo de Fomento de la Economía Social, un órgano consultivo de participación institucional y territorial que reúne a representantes de las comunidades autónomas, diferentes ministerios y las principales entidades del sector, así como a expertos en la materia y organizaciones sindicales, se ha congregado por primera vez bajo la dirección de la recientemente creada Secretaría de Estado de la Economía Social.

Durante la reunión se analizó el fuerte impulso que está recibiendo la economía social a nivel internacional con la aprobación, a instancias de esta cartera ministerial, de la primera resolución de la Asamblea General de la ONU en apoyo a la economía social, en la que se insta a los países miembros a incorporar y potenciar este modelo alternativo con capacidad de generar empleo de calidad.

Asimismo, el Ministerio de Trabajo destacó que durante la presidencia del Consejo de la Unión Europea se consiguió la adopción de la primera Recomendación para desarrollar la economía social de forma homogénea en los 27 países del bloque y mejorar así las políticas europeas en este ámbito a través de una mejora del acceso a financiación de las entidades de la economía social, así como de su normativa y de su visibilidad y reconocimiento.

En el plano nacional, Merino se mostró confiada en que la segunda convocatoria del Plan Integral de Impulso de la Economía Social, que adjudicará 80 millones de euros, pueda consolidar todo el entramado de asociaciones y entidades de este modelo productivo.

Integrada por cooperativas, sociedades laborales, empresas de inserción, cofradías de pescadores y fundaciones, la economía social cuenta en España con más de 43.000 empresas, que generan de forma directa o indirecta 2,3 millones de empleos.