“La LOSU supone un avance respecto a la legislación anterior. Seguramente no es todo lo ambiciosa que podría ser, pero es una ley mejor que la que teníamos y avanza en términos como la internacionalización, la externalización de plantillas, la financiación… Aquí se queda a medias, claramente”, aseguró.

A su juicio, el sistema universitario español en general, teniendo en cuenta los recursos y la financiación que recibe, "debería alcanzar este famoso 1% del PIB, pero no llegamos y está dando unos resultados magníficos”.

Sin embargo, Fitó destacó que en otras cuestiones como la formación a lo largo de la vida, la nueva normativa “introduce este concepto de microcredencial”. “Si bien yo creo que esta idea de aprender a lo largo de la vida va mucho más allá de las micro credenciales, pero bueno, en este sentido yo creo que está muy bien que una Ley Orgánica del Sistema Universitario contemple ya en su en su exposición de motivos esta necesidad de formarnos a lo largo de la vida, que lo haga bajo esta perspectiva de flexibilidad personalización”, matizó.

Para la rectora de esta universidad a distancia, esta idea de microcredencial “da es esta capacidad de flexibilizar itinerarios que, quizá con un formato de máster y grado evidentemente son demasiado rígidos para poder estar adaptándonos continuamente a las necesidades del mercado laboral”.

Precisamente, sobre la situación laboral del profesorado universitario, Fitó confesó que no atisba en su claustro problemas que se dan en la mayoría de los campus españoles. “Somos la Universidad joven, creo que aún nos queda tiempo para para que nos llegue esta oleada de jubilaciones. Además, como hemos crecido también de manera continua a lo largo de los de estos 27, tenemos una distribución demográfica bastante equilibrada. También en nuestro caso, por el tipo de modelo que tenemos [el de formación ‘online’ y a distancia], contamos con miles de colaboradores docentes y responden a perfiles profesionales y académicos muy variados. Por lo tanto, creo que en este sentido aún estamos en una situación bastante buena”.

MUJER Y UNIVERSIDAD

Àngels Fitó, rectora de la UOC desde el pasado abril, es experta en dirección fiscal y financiera y control de gestión y doctora en Ciencias Económicas, además de una de las pocas rectoras que hay en las universidades Españolas.

“Debería llegar un momento en que no deberíamos hablar de esto. Lo que pasa es que es cierto que los requisitos que se han impuesto hasta el momento para poder ser rectora tienen un sesgo, pues para alcanzarlos se requieren unas cuantas décadas. Llevamos retraso en el reconocimiento de la labor de la mujer en el ámbito académico y científico, que afecta a las posibilidades para que las mujeres sean rectoras. Como en los requisitos se impone el ser catedrático y sólo hay un 20% de catedráticas, pues evidentemente las posibilidades son mucho menores”, explicó.

No obstante, prosiguió, la LOSU “abre tímidamente a que perfiles más diversos puedan alcanzar esta máxima posición en el ámbito de las universidades”. “Yo creo que con el tiempo llegaremos a esta situación de normalidad”, reflexionó.

La máxima responsable de la Oberta también aventuró, de cara a un nuevo Gobierno y ante la hipotética remodelación de los ministerios, la posibilidad de aglutinar en una misma cartera Ciencia y Universidad. “Van de la mano”, justificó. “Las universidades somos catalizadoras del conocimiento científico que se genera en muchas partes, no solo en la universidad también en otro tipo de organizaciones”, argumentó.