Así lo reivindicó el presidente de la red, Luciano Poyato, en un comunicado emitido coincidiendo con el Día Mundial de la Lucha Contra el Sida, que se conmemora este jueves, y en el que recordó que, según datos de Onusida, durante los dos últimos años el “progreso” contra el VIH “ha caído, debido a la reducción de recursos”.

“No debemos olvidarnos de otra pandemia, que es la del VIH, a la que no hay que dejar de lado porque son muchas las personas las que están aún en riesgo”, espetó Poyato, que subrayó que en España hay entre 140.000 y 170.000 portadores de VIH.

A este respecto, instó a “impulsar” el Foro Europeo de la Sociedad Civil sobre VIH, Hepatitis y Tuberculosis para que las entidades sociales puedan hacer “incidencia” en las políticas de salud y “avanzar” en esta materia.

Según Poyato, “el estigma y la discriminación” hacia estas personas “es todavía un reto en una sociedad como la nuestra” y juzgó “urgente” avanzar en políticas para tratar las desigualdades en todos los ámbitos de la vida y alcanzar los objetivos de la Agenda 2030 en este sentido.

BARRERAS

En paralelo, alertó de que muchas personas “sufren discriminaciones y prefieren retrasar las visitas a las unidades sanitarias o especializadas” en el tratamiento de la infección y otras “prefieren ocultar su estado serológico a sus redes de apoyo" como amistades, familiares o parejas sexuales "por miedo al estigma”.

“Este rechazo social hace que las personas con VIH puedan ver minada su motivación a la hora de adoptar pautas de cuidado personal y adherencia al tratamiento”, lamentó, para mostrarse convencido de la necesidad de “emprender acciones conjuntas" con el fin de "maximizar y garantizar" su acceso a los servicios integrales de VIH, además de "derribar las barreras legales y sociales aún existentes y dotar de recursos que permitan una protección social integral a las personas con diagnóstico positivo”. En este punto, hizo un llamamiento a “eliminar los falsos mitos” e indicó que las personas en tratamiento con carga viral indetectable “no suponen un riesgo de transmisión”.

Junto a ello, también defendió la necesidad de “mejorar” el acceso a la profilaxis prexposición en todas las comunidades autónomas para prevenir el VIH entre las personas “más vulnerables”, dado que se trata de medicamentos que “reducen las probabilidades” de contraer el VIH a través de las relaciones sexuales o el consumo de drogas inyectables.

UNAD trabaja, junto con sus más de 200 entidades, en la prevención, detección y seguimiento del tratamiento para reducir las infecciones por VIH entre las personas que consumen drogas inyectables y/o que mantienen prácticas sexuales sin protección.

Entre sus “principales” líneas de trabajo también está el intentar “poner fin” al estigma de las personas que viven con este virus y desarrollar diferentes proyectos de formación para “mejorar” la prevención y la intervención en el ámbito del VIH/SIDA y otras infecciones de transmisión genital entre la población “en situación de mayor vulnerabilidad social” y “especialmente” personas con problemas de adicciones.