"El caviar ecológico de Riofrío, producido en la localidad granadina del mismo nombre", explicó, fue "el primero en el mundo en obtener la certificación ecológica, y hoy es un ejemplo de cómo un producto gourmet puede adaptarse a los nuevos tiempos sin perder su esencia".

Tradicionalmente vinculado a celebraciones invernales como la Navidad, "el caviar se reinventa y gana presencia en propuestas más frescas, accesibles y creativas, pensadas para disfrutar también en los meses cálidos. Desde tartares, ceviches, ensaladas o blinis con crema agria, hasta combinaciones más atrevidas como pizzas gourmet o cócteles de autor, el caviar rompe moldes y conecta con una nueva generación de consumidores curiosos, que valoran tanto la calidad como el compromiso ambiental".

Riofrío subrayó que su caviar ecológico "destaca por su textura delicada, su sabor suave y el punto justo de salinidad. Maridado con espumosos, champanes o vinos blancos, ofrece una experiencia gastronómica elegante, refrescante y contemporánea".

"En el Día Mundial del Caviar, desde España se pone en valor no solo la calidad de este producto singular, sino también el papel del país como referente en innovación gastronómica y sostenibilidad alimentaria. Junto al caviar español, dejemos atrás el ruso, destacan otros productos emblemáticos como el aceite de oliva virgen extra —líder en exportación y premiado por su excelencia— o el jamón ibérico de bellota, un icono de la dieta mediterránea que trasciende fronteras", incidió la marca.

"Con iniciativas como la producción ecológica certificada y el desarrollo de nuevos formatos de consumo, el sector agroalimentario español demuestra su capacidad para liderar una gastronomía de vanguardia, comprometida con el entorno y capaz de conquistar nuevos mercados sin perder sus raíces".