Así lo manifestó Margarita Robles en declaraciones a los medios desde la base multinacional, en las que elogió la “gran entrega y profesionalidad” de los soldados españoles, y quiso “transmitirles el agradecimiento” por su trabajo.

Por otra parte, señaló que su visita buscaba “poner de relieve la unidad de todos los países” para “dejarle muy claro a Putin que esta guerra terrible y cruel de Ucrania no la va a ganar”. Por otra parte, subrayó que “España está firmemente comprometida con la paz, y nuestros soldados, en misiones como la de Letonia, ponen de relieve ese compromiso”.

La titular de Defensa expresó su “admiración a los hombres y mujeres del contingente español que está aquí en Letonia, como los que están en todos los contingentes, y muy en particular a sus familias”.

Eludiendo las preguntas de la prensa sobre la polémica sobre el caso Pegasus, Margarita Robles recalcó que “España se siente muy unida a los ciudadanos de Ucrania”, y “es el momento de decirlo aquí precisamente, en Letonia”. Sobre su posible dimisión, tras la peticiones en ese sentido realizadas por voces como la del president catalán, Pere Aragonès, por el presunto caso de espionaje, la ministra se limitó a decir que “España se siente en este momento muy unida a sus Fuerzas Armadas trabajando por la paz y yo como ministra de Defensa también”.

REFUERZO TRAS LA INVASIÓN

El Ministerio de Defensa reforzó el pasado 1 de marzo con 150 militares el contingente español desplegado en Letonia, en la misión enhanced Forward Presence (eFP), integrados en el Battle Group liderado por Canadá, que hasta ese momento contaba con 350 efectivos.

La iniciativa, según explicó el Departamento que lidera Margarita Robles, se enmarcó dentro de los planes de respuesta para preservar la paz y la seguridad, aprobados por todos los países miembros tras la invasión de Ucrania por parte de Rusia.

Las capacidades adicionales aportadas por España con el refuerzo fueron una Unidad de Artillería de Campaña, una Unidad de Ingenieros (Zapadores y Apoyos), y capacidades de apoyo logístico.

La misión eFP de la OTAN tiene como objetivo mantener la disuasión frente a cualquier agresión a los Aliados Bálticos, a través de un despliegue de naturaleza defensiva. La OTAN ya dispone de cuatro grupos tácticos multinacionales en Estonia, Letonia, Lituania y Polonia respectivamente. Tras la invasión rusa, la Alianza Atlántica prevé el despliegue de cuatro nuevos grupos de batalla en Europa oriental y en el sur de Europa.