"Es un terreno enormemente resbaladizo", señalaron estas fuentes, para las que ee tipo de recomendaciones "no se pueden hacer cara al público" y lógicamente provocan que la ciudadanía se pregunte si un abogado que se pronuncia de esa manera no rebasa los límites de la legalidad.

A su juicio, "el abogado está para defender, tiene que dar los consejos que mejor conciernen a la defensa y parte de la defensa es mantener la libertad del cliente", pero siempre hay que evitar "pasar del consejo al cliente a la cooperación en el delito".

Gerez declaró hoy a Onda Cero que "si consiguera entrar en contacto con el señor Roldán, de momento no le podría recomendar que viniese a España" porque su ausencia "se debe única y exclusivamente a la evidente certeza de que entraría en prisión y yo eso no se lo deseo".