Así lo afirmó Díez en una entrevista en Servimedia, con motivo de la presentación de su nuevo libro 'La sombra. Memoria histórica de Zapatero', en la que destacó que el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero "es el tumor" y Sánchez, "la metástasis" de lo que viene viviendo España bajo sus mandatos.

"La gente no se acuerda, pero Sánchez perdió las elecciones", señaló Díez para añadir que ahora "ya no le llaman para reuniones importantes, cuando antes se hablaba de que le iban a nombrar cosas maravillosas, y ahora todo el mundo se ha dado cuenta". Así, consideró que el jefe del Ejecutivo "está desprestigiado a nivel internacional" y "los únicos que le quieren y le felicitan son los dictadores, Xi Jinping, Maduro y Hamás".

También afirmó que nada de lo que Sánchez hace lo ha inventado él porque "Zapatero le susurra al oído". "Sánchez es un tipo que vive bajo la sombra de Zapatero y que hace las cosas que hace porque antes las hizo Zapatero". "Zapatero envenenó la convivencia entre españoles, radicalizó primero a las bases del Partido Socialista y después, cuando ya él ganó las elecciones sobre 192 muertos en el 2004, trasladó esa misma radicalidad al conjunto de la sociedad", relató.

"Las cosas que hace Sánchez las puede hacer porque ya acogió a esa sociedad partida por la mitad. Si Sánchez proclama que "voy a levantar un muro" y no pasa nada, es porque antes Zapatero levantó una zanja y no pasó nada", declaró.

"EL PSOE YA SE HA MUERTO"

Para Díez, "el PSOE ya se ha muerto" y "no creo en la resurrección de los muertos". Así de explícita habló cuando se le preguntó "¿y después de Sánchez, qué?".

"El PSOE, como partido socialdemócrata nacional vertebrador, parte de la familia de la socialdemocracia europea, murió con Zapatero, es decir, dejó de ser eso. Dejó de ser un partido que defendía la libertad y la igualdad para defender la ruptura entre españoles", afirmó.

Ahora, la expolítica señaló que ve a los socialistas "muy preocupados" por su partido, cuando "deberían de preocuparse por lo que está siendo España".

"El drama no es lo que vaya a ser del PSOE. El PSOE ahora mismo ya no es un partido útil para la democracia. Su mayor preocupación debería de ser qué podemos hacer para recuperar las instituciones, la democracia y para que desde el Gobierno no se trate de invadir a los medios de comunicación, a los tribunales de Justicia o para que no se persiga a los jueces", explicó.

Según Díez, los actuales dirigentes socialistas "tendrían que estar más preocupados por revitalizar la democracia que por revitalizar al PSOE". Así, puso como ejemplo al presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, para señalar que "es el ejemplo perfecto de alguien que quiere que le voten sus ciudadanos presentándose a unas elecciones, pero que sabe que para eso le tiene que votar su agrupación local y, por tanto, no puede ser demasiado crítico con el que manda en el partido, que se llama Pedro Sánchez".

"Si en su partido le declaran enemigo (a Page) no podrá presentarse como candidato a las elecciones porque su propio partido le anulará, le excluirá. Entonces, claro que es la consecuencia de un partido que, como decía antes, ha abandonado la defensa de la ciudadanía por la identidad, ha abrazado la identidad", subrayó.

Por último, Díez consideró que "puede surgir un partido socialdemócrata, no sé si con las mismas siglas, no sé si con gente que todavía está dentro del Partido Socialista, con gente a la que ya han expulsado del Partido Socialista. Pero para eso, el PSOE tendrá que pasar unos años en la oposición".

Según la exdirigente en esta formación, "puede ocurrir que surja otra vez un partido socialdemócrata en España y a mí me parecería una buena idea. Pero esto de pensar que hay un PSOE bueno y un PSOE malo y que ahora mismo, digamos un PSOE con el que se puede pactar, no. No hay. No hay más PSOE que el del caudillo Sánchez", zanjó.