Rouco hizo este elogio del presidente fallecido en la homilía que pronunció durante los funerales de Estado oficiados en la Catedral de La Almudena, al que asistieron la viuda y familiares del difunto, así como los Reyes, los Príncipes, el presidente del Gobierno y otras destacadas personalidades de la vida política y social.

El cardenal señaló que el "horizonte de la fe cristiana" explica el comportamiento de Calvo-Sotelo como esposo y padre, como universitario "de fina perspicacia intelectual, de católico seglar, atento y finamente sensible a todo lo que significase auténtica renovación de la Iglesia".

Y también explica, a juicio del cardenal, su conducta como "profesional y hombre público, dedicado por entero al servicio de su pueblo y de su patria, fuesen cuales fuesen las dificultades del momento, incluso en las más dramáticas, cuando la lealtad, esa virtud tan ligada a la auténtica verdad de lo humano, se pone a prueba".

Rouco subrayó que "su adhesión a una concepción cristiana del hombre, de la sociedad y del mundo, en medio de todas las oscuridades de la frágil existencia humana, le distinguió siempre".

A los funerales de Estado por quien se hiciera cargo de la presidencia del Gobierno de España tras el intento de golpe de Estado del 23-F también asistieron el presidente del Congreso, José Bono, y el del Senado, Javier Rojo, así como el presidente del Consejo General del Poder Judicial, Francisco Javier Hernando.

También estuvieron presentes la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, y varios ministros; los ex presidentes José María Aznar y Felipe González; y el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, entre otras personalidades.