Así lo afirmó en su intervención en la sesión de control al Gobierno en el Congreso celebrada este miércoles. Una propuesta a la que el presidente no se refirió y recordó que los ayuntamientos y las comunidades autónomas "tienen amplias competencias" y "por dogmatismo ideológico no están aplicando las palancas que les proveen la ley estatal".

"El Gobierno de España continua con su compromiso", señaló Sánchez y explicó que el Ejecutivo aprobó ya el nuevo plan estatal de vivienda "para prohibir que puedan venderse a fondos buitres esas viviendas de protección oficial". También recordó que se puso en marcha, a través del Instituto de Crédito Oficial (ICO) "mecanismos para avalar a los jóvenes que tienen dificultades para adquirir una vivienda" y añadió que se declaró "la guerra" a todo lo que tiene que ver con los pisos turísticos. "Hemos retirado más de 52.000 pisos turísticos de las plataformas digitales y estamos utilizando todas las herramientas para poner pie en pared y resolver el drama de la vivienda en este país", recalcó.

Por su parte, Rufián señaló a Sánchez que "lo que puede acabar con su Gobierno es el drama de la vivienda". El diputado de ERC explicó que el salario mínimo es de 1.300 euros y el alquiler ya alcanza los 1.600 euros. "Imaginen un bien que cada vez sea más caro y cuya solución para el Gobierno sea financiar con cheques por detrás a quien lo crea", señaló. "Nosotros le proponemos la intervención del mercado, romper con el bucle tóxico de la especulación", afirmó y sugirió que los compradores que quieran adquirir vivienda para especular, deberían pagarla "un 30,40 o 50% más cara".