SAN FERMIN. TRES HERIDOS GRAVES EN UN PELIGROSISIMO ENCIERRO MASIVA PRESENCIA DE CORREDORES
- En la calle Estafeta se produjo un "montón" (caída tumultuosa) en la que resultaron heridos 65 corredores
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Los Pablo Romero, a pesar de su nobleza, produjeron dos heridos graves por asta de toro en la cuesta de Santo Domingo, en los primeros metros del recorrido del encierro.
Un toro cárdeno enganchó a Manuel Huici Iko, vecino de Pamplona, de 40 años, y lo arrastró durante varios metros prendido del cuerno por la faja.
Además de las contusiones mútliples, el corredor presentaba una cornada en la parte superior del hemitórax que desgarra los pectorales mayor y menor, produce varias fracturas costales y penetra rozando la aorta. Su pronóstico es grave y permanece ingresado en la UCI del Hospital de Navarra.
El segundo herido por asta de toro es el pamplonés Javier Domeño Otaona, de 46 años, que presenta una heida de 15 centímetros que afecta a fosa renal, llegando incluso a la musculatura paracervical.
Asímismo, resultó herido de gravedad el joven Iñigo Ojer, de 19 años y vecino de Pamplona, que sufrió traumatismo ocular en el ojo derecho, esguince cervical y contusiones torácicas, como consecuencia de los golpes y pisotones que sufrió en el "montón" formado en la calle Estafeta.
65 HERIDOS EN EL "MONTON"
La formación de este "montón", con varias docenas de corredores caídos en el suelo, produjo numrosos heridos y contusionados. En total, los puestos de socorro de la Cruz Roja atendieron a 65 corredores, entre ellos a cinco mujeres, y efectuaron 10 traslados a los servicios de urgencias de los centros hospitalarios.
Los Pablo Romero salieron a gran velocidad de los corrales de Santo Domingo con el cohete lanzado a las ocho de la mañana. Enseguida, tres toros cárdenos se colocaron a la cabeza de la manada y se distanciaron unos metros del resto de la manada. En este tramo se produjeron las dos coidas graves del encierro de hoy, que duró cinco minutos y medio.
Los momentos de máximo peligro se viviveron al final de la calle Estafeta, donde se formó un "montón" de corredores por la aglomeración de personas que se encontraban en esa zona. La policía municipal ayudó a levantarse a algunos mozos, tratando de deshacer el peligroso tapón humano antes de que llegaran los toros, pero no fue posible.
Afortunadamente, tanto toros como cabestros saltaron por encima del "montón" y ni siquiera el toroque quedó suelto embistió a los corredores.
(SERVIMEDIA)
11 Jul 1993
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