Así lo indicó Sánchez en declaraciones a los medios de comunicación tras realizar su décima visita a isla de La Palma desde la erupción del volcán Cumbre Vieja en septiembre del año pasado.

Preguntado sobre si se plantea hacer cambios en su Gobierno a la vuelta de las vacaciones o en las próximas semanas, como han apuntado en los últimos días varios medios de comunicación, Sánchez se mostró sorprendido por las informaciones publicadas y fue tajante a la hora de negar esa posibilidad.

El jefe del Ejecutivo afeó que a veces se encuentra en los medios noticias que “ni tan siquiera” ha "pensado" en su cabeza, por lo que hizo un llamamiento a que los medios de comunicación “informen" en vez de entrar en especulaciones.

“Entiendo que las informaciones que se publican son para que yo luego responda y diga que no hay ninguna crisis de Gobierno y se traslade una imagen de que este no es un Gobierno estable”, destacó sobre una supuesta intencionalidad de los medios de comunicación a la hora de publicar noticias sobre posibles cambios de ministros.

“Estoy extraordinariamente orgulloso del trabajo que hacen los ministros y, por favor, una cosa es informar y otra cosa es intoxicar y las intoxicaciones desde luego nada tienen que ver con lo que pienso y en cómo vamos a actuar en este semestre que es importante para afianzar la recuperación económica”, concluyó.

Las especulaciones sobre posibles cambios en el Ejecutivo de Sánchez se han incrementado en las últimas semanas, especialmente desde que el pasado mes de julio acometió una profunda modificación en la cúpula del PSOE, donde la ministra María Jesús Montero sustituyó a Adriana Lastra como vicesecretaria general, la ministra Pilar Alegría reemplazó a Felipe Sicilia como portavoz de la Ejecutiva Federal y el exlehendakari Patxi López ocupó el cargo de Héctor Gómez como portavoz en el Congreso de los Diputados.

El propio Sánchez argumentó entonces que el propósito era coordinar mejor la acción política entre La Moncloa y el PSOE, así como dar impulso a la actividad del partido ante las elecciones municipales y autonómicas de 2023. Los cambios alimentaron los rumores internos dentro del propio PSOE de que también había que acometer una reestructuración en el Consejo de Ministros para ganar perfil político y capacidad de explicar mejor a los ciudadanos la gestión que se está llevando a cabo.

En algunos sectores socialistas se apuntaba incluso que había llegado el momento de cambiar algunas de las fichas que Unidas Podemos pone en el Gobierno, dentro del acuerdo de coalición que mantienen ambas formaciones políticas.

Finalmente, este martes el presidente del Gobierno despejó esa posibilidad al descartar cambios de sus ministros y al subrayar que está contento con la labor que están haciendo todos los actuales desde que en julio del año pasado acometió por sorpresa una amplia remodelación, con las salidas -entre otros- de Carmen Calvo, José Luis Ábalos e Iván Redondo.