Así se pronunció en una entrevista en Rac1 recogida por Servimedia, en la que insistió en que "la mano está tendida", que su "voluntad de negociación es inequívoca" y que van a cumplir con los acuerdos firmados con Junts.

En este sentido, anunció ese real decreto ley que, entre otros aspectos, permitirá "facilitar y flexibilizar a los entes locales y también a los ayuntamientos las inversiones financieramente sostenibles". "Los alcaldes, las alcaldesas, los presidentes de Diputación van a tener más capacidad, más flexibilidad para invertir, por ejemplo, en proyectos que no que conlleven un gasto corriente", como "construcción de vivienda, de gestión de agua y un largo etcétera que va a ser bueno para los ayuntamientos de Cataluña, pero también para los del conjunto del Estado".

Tras recalcar que "es algo que se lo debemos a Junts porque fue quien lo exigió como uno de los principales compromisos", explicó que este real decreto ley también incorpora medidas "para facilitar el cumplimiento de las obligaciones fiscales a las empresas". "Vamos a ampliar ese plazo para impulsar y promover dentro de esas empresas la digitalización de los procesos de facturación", que es algo que reclamaba "el empresariado catalán" y de "lo que se ha hecho eco Junts".

Además, anunció que llevarán a los próximos Consejos de Ministros un real decreto para "crear una partida que ayude a los propietarios ante los impagos en caso de arrendamiento a jóvenes o a familias vulnerables".

Tras volver a reconocer esos incumplimientos" y reconocer que el diálogo con Junts "está roto", aseguró que su objetivo es "cumplir con esos acuerdos, con esos compromisos, porque realmente merece la pena".

Al mismo tiempo, anunció que "Cataluña, el conjunto del Estado y las comunidades autónomas van a ver un nuevo sistema de financiación autonómica propuesto por el Gobierno" que, recordó, es un "compromiso asumido con ERC y con el resto de autonomías, con más recursos en un sistema multilateral", con el que se reconocen "la diversidad y las singularidades de los territorios, particularmente, Cataluña".

Sánchez también hizo referencia a la posibilidad de que Cataluña recaude todos sus impuestos, señalando que hay "una complejidad técnica importante" y un "desafío en lo que representa el funcionariado, la parte técnica de de la gestión de estos impuestos". Pese a ello, insistió en que "es un compromiso que tenemos con Esquerra Republicana y por supuesto nuestro nuestra ambición es cumplirlo". Eso sí, avisó de que, "probablemente, no se pueda cumplir durante los próximos años en su totalidad, pero caminaremos hacia esa línea".

Siguiendo con los compromisos, Sánchez volvió a reiterar su intención de que el catalán, el euskera y el gallego sean reconocidas como lengua oficiales en el Parlamento Europeo, confirmando que ha mantenido conversaciones con el canciller alemán Friedrich Merz para trasladarle que "es una cuestión de identidad nacional española".

En este punto, criticó que "el Partido Popular está haciendo un lobby en contra del reconocimiento de estas lenguas para ser utilizadas por parte de las instituciones comunitarias, cosa que no entiendo". E hizo hincapié en que, sin poder "dar una fecha", el Gobierno va a "trabajar para que a lo largo de esta legislatura podamos tener también reconocidos estas otras tres lenguas".