Al terminar la larga votación de los Presupuestos, que ahora comenzarán su tramitación en el Senado, Sánchez compareció ante los periodistas en el patio del Congreso y destacó la “política útil” que suponen, a su juicio, los presupuestos frente al “ruido”, máxime en este “contexto tan difícil”, expresó.

Sánchez dio en varios momentos las gracias a los 10 partidos -que representan a 12,5 millones de españoles- que han respaldo las cuentas porque ha primado el “interés general” frente a los intereses partidistas, lo que resumió como una “victoria del entendimiento entre dispares, entre distantes”. "Hemos demostrado, entre todos, que la política mas allá del ruido es muy útil, sobre todo en este contexto tan difícil de guerra que esta sufriendo Europa y también España".

Sánchez, que se mostró exultante ante los periodistas, reivindicó la aprobación de unos Presupuestos "muy importantes para el país" porque "protegen a la mayoría social", especialmente a los "más vulnerables", y van a "permitir canalizar, de nuevo, un año más, los fondos europeos para modernizar nuestra economía y consolidar la recuperación económica, el crecimiento y la creación de empleo".

"Una votación", dijo, "que garantiza una estabilidad política necesaria a la hora de enfrentar con garantías todos estos desafíos" del momento de incertidumbre derivado del "contexto tan difícil" vigente.

El también líder del PSOE reflexionó sobre el hecho de que a veces se hable de "victorias políticas", y dijo que hoy se ha visto una "más noble", que es la "victoria del entendimiento, en un momento tan complejo" como el que está viviendo el mundo de "extraordinaria incertidumbre".

Nada más confirmar la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, la aprobación de los Presupuestos, el jefe del Ejecutivo recibió continuos mensajes de felicitación en su móvil, según trasladan a Servimedia fuentes de La Moncloa. Unas muestras de emoción que, según dichas fuentes, también se vieron con los abrazos que, en la sala de Gobierno del Congreso, se dio el presidente con los ministros presentes en el Hemiciclo.

Después de hablar con los periodistas, Sánchez se montó en el coche y abandonó el Congreso, lugar al que volverá para el debate y posterior votación de la proposición de ley de reforma Código Penal que modifica el delito de sedición.