Sánchez hizo esta afirmación en la sesión de control al Ejecutivo en el Congreso, donde el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, le preguntó "cuál es su prioridad" como presidente.

A este respecto, Sánchez destacó que el dato positivo resaltado por la OCDE sobre la economía española "no es casualidad" y se debe a las políticas de fomento del empleo estable y digno aplicados por el Ejecutivo, como la subida del salario mínimo interprofesional.

Defendió que desde La Moncloa se está impulsando una transformación del modelo productivo nacional para lograr "más industria" y mayor competitividad, destacando medidas como la "solución ibérica" que permitió "abaratar el precio de la luz" y ahorrar 5.000 millones a los contribuyentes durante la crisis energética. Por este motivo, se quejó de que todo ello se pase por alto porque "estamos en el cotilleo", en clara referencia a los mensajes suyos con Ábalos que viene publicando el diario 'El Mundo'.

En su respuesta, Rufián advirtió al presidente sobre la "ofensiva policial, judicial, digital y mediática" que sufre el Gobierno, que calificó como "una especie de golpe de Estado blando", recordando que es similar a la que vivieron "el independentismo y Podemos hace años".

OFENSIVA CONTRA EL GOBIERNO

El portavoz republicano tendió la mano al Ejecutivo, pero le reprochó "repartirse los jueces con la derecha" y "comerciar con un Estado genocida como Israel", además de "frenar la ley de vivienda con la derecha catalana" y permitir que "se carguen la reducción de la jornada laboral".

En tono irónico, Rufián manifestó que le "encantaría" saber los mensajes de WhatsApp" entre dirigentes del PP como "Cayetana Álvarez de Toledo y Casado" o "entre Feijóo y Mazón, sobre todo cuando el segundo estaba en el Ventorro", por el restaurante en el que comía con una periodista el día de la dana de octubre.

RESPUESTA PRESIDENCIAL

Sánchez replicó que la oposición pretende "ganar por agotamiento" ante "la falta de un proyecto político", aunque vaticinó que volverán a "perder por aburrimiento porque aburren" y "hasta las ovejas se entretienen con cualquier casquería que les dan".

El presidente matizó algunas afirmaciones de Rufián, defendiendo que "una amplísima mayoría de jueces y juezas" trabajan "de manera imparcial" y negando que el Gobierno "comercie con un Estado genocida", en referencia a Israel.

También rechazó haber mantenido un "silencio cómplice ante los ataques", recordando que su Gobierno lleva "sufriendo los siete años" de mandato las críticas de la oposición y determinados medios de comunicación.

PROYECTO DE GOBIERNO

El jefe del Ejecutivo respondió al diputado independentista que sus principales objetivos son el crecimiento económico, la creación de empleo y la lucha contra la desigualdad, especialmente en el acceso a la vivienda mediante políticas públicas específicas.

En política exterior, destacó dos líneas fundamentales: la defensa del multilateralismo y el refuerzo del proyecto común europeo, que considera debilitado "como consecuencia de la internacional ultraderechista".

Concluyó que los datos económicos positivos y la agenda reformista del Gobierno contrastan, según el presidente, con una oposición que carece de proyecto político alternativo y que centra su estrategia en el desgaste personal y las polémicas mediáticas.