Así lo indicó Sánchez tras mantener un encuentro hoy en el Palacio de La Moncloa con el consejero delegado y presidente global de Cisco Systems, Chuck Robbins, y una representación de directivos de la tecnológica, en el que abordaron las oportunidades que ofrece la inversión anunciada por Cisco para ubicar su nuevo centro de diseño de semiconductores en Barcelona.

Se trata de la primera instalación de este tipo de la multinacional en la Unión Europea, en lo que supone una apuesta por España, tras las reuniones mantenidas previamente entre Sánchez y Robbins en La Moncloa en julio de 2021 y en el último foro de Davos el pasado mes de mayo.

“España se está convirtiendo en un actor clave para lograr el objetivo de la UE de alcanzar el 20% del mercado mundial de chips en 2030. Hemos aprobado el Perte de microchips y contamos con la hoja de ruta, las reformas y los incentivos para atraer el talento y consolidar el actual ecosistema español”, aseguró Sánchez.

Asimismo, reiteró el compromiso de España con el objetivo europeo de fabricar uno de cada cinco microchips que se producirán en el mundo. Además, recordó que el Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (Perte) de microelectrónica y semiconductores movilizará más de 12.000 millones de euros, dentro de los fondos del Plan de Recuperación para reindustrializar el país.

El nuevo proyecto de Cisco se ubicará en el centro de innovación que la tecnológica ya tiene en Barcelona. La inversión se enmarca en el contexto del Perte de los semiconductores, que pretende impulsar más operaciones en este ámbito. España está bien posicionada en este sector estratégico, al ser un ‘hub’ de talento internacional y de emprendimiento, con una regulación favorable, mediante iniciativas como la Ley de 'startups'.

PERTE

El de los semiconductores es el Perte que contará con una mayor inversión pública. Se trata del proyecto más ambicioso del Plan de Recuperación por su impacto transformador para la industria y su contribución a reforzar la autonomía estratégica de España y de la Unión Europea en materia tecnológica, un elemento crucial ante la situación en Rusia y Ucrania.

El objetivo es impulsar en España todas las fases de producción de los semiconductores, sector clave para el tejido industrial español en áreas como la automoción, el aeroespacial, el equipamiento sanitario, las telecomunicaciones, la producción de energía o la automatización industrial. Mediante una colaboración público-privada, la estrategia del Gobierno contempla fortalecer la capacidad científica y la I+D+i en microprocesadores de vanguardia en España.