Así lo pidió Sánchez en su intervención en la Cumbre del G20 celebrada en Johannesburgo, en la que añadió que "esto implica defender la soberanía, la independencia y la integridad territorial, y garantizar el estricto cumplimiento del derecho internacional humanitario".

Sánchez recalcó que "el desarrollo inclusivo y sostenible es imposible sin paz". "Sin paz, sin respeto a las normas multilaterales, nuestros esfuerzos en materia de comercio, desarrollo y desigualdad no tendrán éxito", subrayó, y añadió que España mantiene su compromiso de "trabajar con todos ustedes para garantizar que el G20 fortalezca la cooperación, proteja a los más vulnerables y no deje a nadie atrás".

El presidente también aseguró que "nos enfrentamos a una emergencia de desigualdad tan sistémica como la emergencia climática". "La concentración excesiva en la riqueza socava el crecimiento, corroe las instituciones democráticas y alimenta la polarización", resaltó.

Por ello, pidió abordar este asunto y ello "requiere una tributación internacional justa". En esa línea, rechazó "que se desmoronen los avances que el G20 ha logrado en la reforma fiscal global" y apeló a "normas fiscales adaptadas al siglo XXI".