Sanz hizo esta consideración en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno a la decisión de la Justicia de aceptar la querella contra Maroto por decir que “fueron 7.291 las víctimas o personas mayores asesinadas” en estas residencias de la región durante la pandemia, por los protocolos sanitarios que se implantaron en aquel momento.

“Perdón ninguno, lo que hizo fue tratar de justificar de una manera bastante pobre una actitud en la que claramente habló de asesinatos en las residencias”, reprochó Sanz. La vicealcaldesa piensa que esa querella está “bien puesta” y que la portavoz tendrá que “atenerse a las consecuencias de esas palabras de extraordinaria gravedad dirigidas hacia oponentes políticos”.

Después de aquellas palabras Maroto publicó un comunicado, en el que admitía que su intención con estas declaraciones no era “acusar a nadie de asesinato, sino destacar que estas personas fallecieron en las residencias madrileñas sin recibir tratamiento médico adecuado” y afirmó que “no fueron las palabras más adecuadas”. Esta mañana también reiteró que no quiso “acusar a nadie de asesinato”.

En cualquier caso, para Sanz esto es un “amago de disculpa” simplemente para “evitar la querella” y considera que la socialista “no se ha retractado en ningún momento de esas palabras”, por lo que ve “lógico” que un jurado haya entendido que “tiene que ir a declarar”.