La producción manufacturera creció en enero, por undécimo mes consecutivo, como consecuencia del "robusto crecimiento" de los nuevos pedidos el mercado interior, frente a un menor crecimiento de las peticiones del exterior.

Esta mejora de la producción no tuvo su reflejo en el empleo, que sigue cayendo por decimonoveno mes consecutivo. Las empresas atribuyen este hecho a su política de aumentar la productividad y reducir costes.

El precio medio de las compras se elevó por quinto mes consecutivo en enero. Las empresas vinculan el aumento de los precios al alza del coste de los metales, principalmente el acero.

Mientras, por primer vez en diez meses se registró una inflación de los precios medios cobrados, principalmente por unos costes más altos.