Martínez no desmintió que pueda ser la candidata del PSOE, pero tampoco garantizó que finalmente sea la persona que proponga su grupo a la Cámara. "No nos parece correcto hablar de nombres, ni de altenativas antes de que el presidente del Senado presente su dimisión", comentó.

"Yo no me considero, en absoluto, candidata a la presidencia", afirmó. "Como senadora, tengo un presidente del Senado, que se llama Juan Ignacio Barrero y, mientras continúe en el cargo, yo no tengo nada que decir", agregó.

"Creo", prosiguió, "que todos (los senadores demócratas) nos sentimos muy defraudados, ya que después de haber votado a favor de Barrero, que a estas alturas no tengamos constancia ni siquiera de su imisión y sólo sepamos que se ha designado a la futura presidenta en una rueda de prensa desde La Moncloa es indignante".

Acerca de su candidatura, reiteró que en su grupo "hay senadores y senadoras de unos currículos magníficos y de una experiencia parlamentaria intensa y, por lo tanto, tenemos un material personal muy valioso. En su momento, el grupo hará la propuesta, pero habrá que esperar a que Barrero presente su dimisión".

Al ser preguntada por si le gustaría personalmente ser la candidataformal a presidir el Senado, señaló que "cualquier compañero socialista se sentiría orgulloso de representar la voluntad del grupo. No me gusta entrar en especulaciones. Me ratifico en esperar. Además, soy muy cabezota y las formas creo que son esenciales. Como estamos tratando un grave problema de fondo con las formas del PP, que creo que está tocando el espíritu y letra de la Constitución, no quiero yo entrar en especulaciones".