Esta iniciativa salió a adelante con 16 votos a favor y 11 en contra. En su defensa, la senadora popular Maria Asunción Mayo aseguró que la carga de trabajo de los juzgados especializados en violencia de género es “brutal” porque tienen nuevas competencias, como abordar los delitos de violencia sexual, la mutilación genital femenina y el acoso sexual, entre otras.

La moción pide la creación de nuevas plazas y/o la dotación de los refuerzos y los medios materiales “necesarios” para que la protección judicial de las mujeres víctimas ante “tan miserables delitos no dé, nuevamente, un paso atrás” en España.

Mayo incidió en que la “sobrecarga” que tienen estos juzgados provocará que los asuntos que antes eran “prioritarios” pasen a un segundo plano por la entrada de otros nuevos. Además, aseguró que todos los jueces de España tienen ya suficiente formación en violencia de género.

La senadora del Partido Nacionalista Vasco (PNV) Maria Dolores Etxano aseguró que es necesaria una ampliación de plazas en algunos juzgados, pero se mostró contraria a esta moción del PP porque la usa como “arma política sin datos” contra el Gobierno. Así, defendió la necesidad de una mejor “planificación” en estos juzgados.

Por su lado, la senadora de Bildu Olaia Duarte sostuvo que esta moción “instrumentaliza” el problema existente en estos juzgados y “no aporta soluciones”. De este modo, mostró su disconformidad con la iniciativa, pese a que comparte la necesidad de mejoras en este ámbito.

Finalmente, la senadora socialista María del Lirio Martin defendió que el Gobierno ya incorporó refuerzos en los juzgados de violencia de género y que las reformas que implementa en el espacio de la justicia tienen como fin “atender” a las víctimas con “perspectiva de género”.