Según informó la BBC, el plan original es que los sherpas transporten a localidades más accesibles tanques de oxígeno vacíos, escaleras, estacas, curdas, cartuchos de combustible o cualquier otro material que los montañeros hayan dejado en su ascenso a la cumbre.

Este problema afecta desde hace años a numerosas zonas del macizo del Everest, pero en especial al campamento situado en el Collado Sur, a 7.900 metros de altura, desde donde se inicia normalmente el ataque final a la cumbre, lugar que ha sido calificado como el más sucio del Everest.

Según han declarado funcionarios del NMA, están considerando pagar a los sherpas unas mil rupias nealesas (unos 13,50 dólares) por cada kilo de basura recogido. La asociación, que hace cinco años recogió unos 2.200 kilos de desperdicios, prevé retirar mediante este sistema unas cuatro toneladas de basura.