Según la información publicada este miércoles por la compañía alemana, que recibirá un rescate de 15.000 millones de euros y espera también una línea de avales del Gobierno español, el incremento de sus pérdidas se debe en gran parte a los problemas de Gamesa.

A este respecto, el presidente de Siemens Energy, Christian Bruch, explica que ha sido “un año de desafíos sin precedentes”, aunque destaca que “dos tercios de nuestros negocios se encuentran en una trayectoria de crecimiento rentable, alcanzando o superando sus objetivos para todo el año”.

En cuanto al negocio eólico, advierte de que “todos los ojos deben estar puestos en la reducción de costes, la selectividad y la aceleración de la productividad mientras se mantiene el control”. Sobre el rescate, afirma que “ahora hemos encontrado una buena solución con todas las partes para asegurar nuestro crecimiento acelerado por la transición energética”.

Pese a las pérdidas, los pedidos de Siemens Energy superaron el alto nivel del año fiscal anterior en un 33,8%, alcanzando los 50.400 millones de euros. Por su parte, los ingresos fueron de 31.100 millones de euros, con lo que aumentaron un 9,9% en términos comparables impulsados por el crecimiento en todos los segmentos excepto Siemens Gamesa.

El flujo de caja libre antes de impuestos disminuyó hasta 784 millones de euros frente a los 1.503 millones de un año antes, impulsado por un aumento del flujo de caja libre negativo antes de impuestos en Siemens Gamesa.